José Regino, Luis Alfonso y Simón regresaron a su hogar en la colonia Loma de Roriguera, luego de once años de haber partido a Malasia, dónde fueron acusados de tráfico de drogas están junto a su familia, sus hijos y su madre la señora Carmen quien junto con el resto de sus hijos realizaron cadenas de oración para que un milagro ocurriera.
Ahora la familia González Villarreal está completa, gracias al perdón del sultán de Malasia y a la intervención de las autoridades mexicanas, pero sobre todo porque la señora Carmen se resistió a perder la fe.