El conductor Yordi Rosado contó una anécdota sobre un tremendo susto que se llevó en Culiacán.
Ambos llegaron a un antro, donde un chavo empezó a gritarle a la distancia ”¡Yordi, eres el mejor!”, se acercó y lo abrazó en diversas ocasiones, situación que terminó por incomodar al también locutor, ya que, pensó que estaban burlándose de él. El sujeto se acercó en tres ocasiones a Yordi, cada vez más brusco, pero siempre diciéndole que lo admiraba y que era el mejor de todos. Sin embargo, la última vez que intentó acercarse, el chavo se subió a una silla y le brincó, el conductor logró verlo y se quitó, pero la cosa no se quedó así, pues estaba enojado y terminó por empujar su cara contra el piso. Después de esto llegó la seguridad y sacó al chavo y a sus amigos.
Cuando Yordi quería salir del lugar, le informaron que lo estaban esperando los chavos en una camioneta con armas de fuego para arreglar las cosas, ya que había agredido a su amigo. Finalmente, Yordi cruzó la puerta, se hincó y comenzó a pedir perdón por lo que había hecho; después de unos minutos de rogar por su vida y confirmar que se había equivocado, el chavo accedió a perdonarlo y le invitó unas cervezas en la camioneta.