Las restricciones para los enfermos o sospechosos de covid-19 han sido una constante en los países de América Latina que han celebrado elecciones en medio de la crisis sanitaria.
Y el próximo 6 de junio México se unirá a la lista de naciones que no han podido garantizar el sufragio de las personas enfermas o que por temor no saldrán a votar.
Es más, el propio consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, quien dijo que las elecciones no serán víctima de la pandemia, pidió a quienes tienen covid quedarse en su casa y no acudir a las urnas.
Sin embargo, otros países han llevado incluso la urna al domicilio del votante o hasta el hospital para promover la participación electoral y garantizar su derecho. En México, no se adoptó una sola medida especial para este grupo.
De acuerdo con un análisis que forma parte de un estudio realizado por The International Institute For Democracy and Electoral Assistance (International IDEA) sobre covid-19 y las elecciones, tras una observación del proceso electoral de 52 elecciones nacionales en 51 países, 23 países ampliaron las disposiciones electorales especiales existentes para las personas con covid-19 o que estaban en cuarentena.
Naciones como Bermudas, Myanmar, Corea del Sur, República Checa, Jamaica, Islandia, Croacia, Georgia y Mongolia, por ejemplo, hicieron uso de votaciones anticipadas, voto por correo electrónico, domiciliario o por delegación de poder; en centros de cuidado mediante el uso de una urna móvil, y disposiciones para la covid-19 en los propios centros de votación.