Según un nuevo estudio realizado en la Universidad de Nagoya (en Japón), estas aves no necesitan la luz del sol para despertarse, pues los gallos tienen un reloj interno que les avisa cuando el amanecer está cerca y que funciona incluso en invierno, cuando la luz solar es más escasa. Los científicos descubrieron que esta especie masculina no necesita ningún signo de luz para comenzar a emitir su tan particular melodía. Así que los gallos cantan porque su reloj biológico interno así se los indica.
Otro factor por el cual los gallos tienden a cantar es porque son aves territoriales, y con esta acción demuestran su jerarquía. El canto, su fuerza y sonoridad, es un símbolo de poder entre estas aves. Si algún gallo canta y recibe algún cacareo de vuelta, comenzará una batalla vocal. Y si ambos contrincantes insisten en continuar, esta puede extenderse hasta llegar a un duelo físico. Otra de las causas más evidentes por la cual los gallos cantan es para aparearse. Algunos estudios parecen indicar que el cacareo emitido por el gallo es del agrado de las gallinas, al grado incluso de estimular su ovulación.