El presidente Andrés Manuel López Obrador, en compañía del gobernador de Sinaloa Quirino Ordaz Coppel, inauguraron la planta potabilizadora Miravalles en Mazatlán y su acueducto de 33 kilómetros. También se anunció la construcción del Distrito de Riego de la presa Picachos, cuyo objetivo era dotar de agua a Mazatlán, incorporando 24 mil hectáreas al riego, esta infraestructura quedó pendiente desde el 2011 y se invertirán 2 mil 621 millones de pesos para su conclusión.
El presidente señaló que esta obra quedará terminada antes de que acabe su sexenio, y solicitó la colaboración de los ejidatarios y pequeños propietarios para llegar a un acuerdo en la indemnización por las afectaciones a sus tierras, pues la falta del acuerdo ocasionó que no pudieran ejercerse los 600 millones de pesos que se tenían previsto para este año.
Además, el presidente López Obrador, a solicitud del gobernador Quirino Ordaz, garantizó recursos para poner en marcha la planta de Urías e inhabilitar la de El Crestón, puesto que mejorará la situación del medio ambiente y se recuperará un espacio para el turismo y la recreación, ya que al estar ubicada en uno de los puntos turísticos de Mazatlán, ha provocado malos olores y contaminación al medio ambiente. Se le instruyó a la directora de CONAGUA, Blanca Jiménez Cisneros, a que atienda el proyecto.