El nuevo etiquetado en los alimentos podría provocar que la industria de los alimentos ultraprocesados cambie la forma de elaborar sus productos para evitar que éstos tengan muchas etiquetas.
Así lo señaló Simón Barquera Cervera, director del Centro de Investigación en Nutrición y Salud (CINS) del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), quien agregó que en Chile, país en el que México se basó para los nuevos lineamientos de etiquetado, se detectó este tipo de cambios a raíz de la adopción de la política.
Los efectos de la implementación de este nuevo etiquetado, que tiene por objetivo orientar a la población en la toma de decisiones más saludables al momento de consumir estos productos, se están monitoreando, afirmó Barquera Cervera.
Las empresas tendrán hasta el 30 de noviembre para ponerlos octágonos de advertencia sobre el contenido en exceso de azúcares, calorías, sodio, grasas saturadas y grasas trans.