Cada vez más se notan los daños que el panteón 21 de marzo tiene, tanto por dentro y fuera.
¿La razón?
La falta de inversión en su infraestructura.
Así como lo lees.
Pues tan solo basta dar un recorrido para darse cuenta del deterioro, algunos de ellos son: la barda que lo rodea está a punto de caer, el arroyo (que anteriormente fue revestido) se está despedazando, algunas capillas y tumbas se encuentran en mal estado por las lluvias (desde tener aguas verdes y basura en ellas).
Asimismo, para entrar al panteón caminando es difícil debido al lodo que se forma y entrar en carro solo tiene probabilidad de quedar atascado.
¡No es todo!
Ya que cada temporada de lluvias gran parte del panteón se inunda, incluso el pasado viernes la corriente del arroyo se llevó un cuerpo que estaba en la fosa común, así informó Carlos Danilo Burgos García, coordinador de panteones públicos de Culiacán.
Fuente: El Debate.