A pesar de que el Gobierno mexicano y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) pidió que no se subastaran las 95 piezas del patrimonio cultural de nuestro país, la Casa Millon en Francia las vendió logrando recaudar 1.2 millones de euros.
Las piezas son proveniente de Teotihuacán, Guerrero, Oaxaca y del Sureste de México, estas formaron parte de las culturas olmeca y maya.
Pero, ¿sabes cuáles son los efectos de estas subastas?
De acuerdo con el director general para Europa de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Bernardo Aguilar Calvo, señaló que estas ventas solo fomentan las excavaciones ilícitas, saqueos, tráfico ilegal y falsificaciones. Además, de que le quitan al país la esencia cultural histórica y simbólica.
¡No es todo!
Ya que al parecer estas piezas que pertenecían a la colección privada de una pareja de artistas burgueses, habían sido saqueadas y traficadas.
Entre las piezas se encontraban la estatua de Chalchiuhtlicue, de un sacerdote maya y una vasija del dios Chaac.
Fuente: Expansión Política.