Inscribir el nombre del general revolucionario e indígena, Felipe Bachomo Aki Cruz, en el Muro de
Honor del Congreso, es recordar la deuda pendiente que se tiene con los pueblos originarios, que
es preciso saldarla a través de la consolidación de sus derechos, reduciendo sus niveles de
carencias con servicios públicos básicos y vivienda, expresó el diputado Ricardo Madrid Pérez.
El presidente de la Mesa Directiva ofreció el discurso oficial del Congreso del Estado durante la
develación de la placa en que se inscribió el nombre de Felipe Bachomo durante Sesión Solemne
en la que se contó con la participación de la Secretaria de Educación Pública y Cultura, Graciela
Domínguez Nava, quien llevó la representación personal del gobernador Rubén Rocha Moya.
Acudió en representación del Poder Judicial el Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de
Justicia, Jesús Iván Chávez Rangel.
En su mensaje, el diputado Ricardo Madrid adelantó que en el saldar la cuenta con los pueblos y
comunidades indígenas de Sinaloa, en breve las diputadas y diputados aprobarán reformas y
adiciones a diversas leyes, con el objeto de establecer la representación indígena ante los
ayuntamientos.
Asimismo, añadió, para garantizar que en la integración de los ayuntamientos se incluya al menos
una fórmula de personas pertenecientes a los pueblos originarios, la cual deberá acreditar que en
realidad es indígena.
“Estoy seguro de que con el apoyo del gobernador Rubén Rocha Moya, estas reformas y muchas
más serán una realidad y podrán aplicarse en el próximo proceso electoral”, estimó.
Incluso brindó un reconocimiento institucional al gobernador “porque hemos visto que en el
ejercicio de su gobierno, ha mantenido una estrecha relación con los pueblos y comunidades
originarias del estado”.
Le reconoció también a Rocha Moya el impulso a una relación entre poderes basada en los
principios democráticos, mediante el diálogo circular y constructivo.
Del general revolucionario Felipe Bachomo, dijo que fue de origen muy humilde, y que por tanto
pasó su niñez en la milagrería de la lucha por sobrevivir, lo cual moldeó su personalidad e ideales.
Recordó que desde muy chico se acostumbró a ser proveedor de su hogar, pues recorría las
milpas para recoger maíz y fruta.
“Fue educado en un entorno cultural totalmente endo-étnico , no asistió a la escuela y sólo habló
el yoreme hasta los siete años. Dicen los historiadores que no sabía leer ni escribir, pero sí
manejar centavos y dar feria”, expuso.
Recordó también que se desempeñó como “botero de burro” para entregar agua, así como
también fue aprendiz de carpintero, oficios que le permitieron recorrer la geografía del norte del
estado, e incluso viajar a Sonora, donde conoció las luchas de los pueblos yaquis y sus
enfrentamientos con el gobierno.
Aunque participó en la Revolución Mexicana, dijo el diputado Ricardo Madrid, el General Felipe
Bachomo no entendía de política y sólo al frente de los que reclamaban lo que era suyo, que era
la tierra.
En su paso por las filas revolucionarias se incorporó a las fuerzas del General Pancho Villa, pero
posteriormente lo hicieron preso y lo fusilaron un 24 de octubre de 1916, en la ciudad de Los
Mochis, precisó el diputado Ricardo Madrid