Luego de que la Fiscalía General del Estado (FGE), ejecutara una orden de aprehensión contra la madre de la menor de cuatro años que falleció en una de las cuarterías de Juan José Rios Guasave, por feminicidio y ocultamiento de cadáver, la titular de la Secretaría de la Mujeres (SEMUJERES), Teresa Guerra Ocha, reconoció que la versión de los hechos cambió totalmente, sin embargo, pide que se garantice la traducción de la madre tarahumara y que ella esté consciente de lo que está declarando.
La funcionaria estatal expuso que las periciales que dieron a conocer en un principio eran que la muerte de la niña no habia sido violenta, y en esa circunstancia se adjudicaba de rensponsabilidad omisión de cuidado y entierro clandestino.
Reveló que incluso, la propia Fiscalía General del Estado insistía en una judicializacion, pero aquí, ya habían hecho otra autopsia, luego de que la madre revelara ante esa instancia que ella sí había ejercido violencia y posteriormente procedió a enterrarla.
“Pero mucho más trágico es hablar de que hubo violencia contra la menor que la propia madre produjo esa violencia y creo que habría que analizar bien el contexto de la propia señora, pensamos que no había dolo, hoy las circunstancias cambian, pero no vamos a dejar de estar al pendiente y poder garantizar que el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas garantice que la traducción se de en la audiencia y que la señora esté consiente de lo que está declarando”, añadió.
Guerra Ochoa enfatizó que ahora que se da a conocer que hubo dolo, no debe quedar impune una muerte con violencia.
“¿Ahora que cambió esta versión, están a favor de que se le judicialice? Evidentemente si hubo dolo, las circunstancias que hayan sido, una muerte con violencia no debe queda impune y no podemos dejar de pugnar porque la justicia se dé”, dijo.
Finalmente extendió que el juez deberá valorar la circunstancia y la defensa deberá hacer lo propio, garantizando que también se brinden sus derechos a la hora de declarar.
Con información de Los Noticieristas.