Este miércoles, un sismo de magnitud 5,7 impactó la capital de Nueva Zelanda, Wellington, según informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El temblor se produjo bajo el estrecho de Cook entre las islas Norte y Sur, a una profundidad de 74 kilómetros (50 millas), y no hubo informes inmediatos de daños ni alerta por tsunami.
El Centro Nacional de Manejo de Emergencias de Nueva Zelanda informó a través de Twitter que el temblor “se sintió en la isla Norte”, mientras que la nación se encuentra en plena recuperación del ciclón Gabrielle, que ha dejado cuatro muertos y graves deslaves e inundaciones en la región.
Nueva Zelanda, con más de 5 millones de habitantes, se encuentra en el “Círculo de Fuego” del Pacífico, donde los temblores son frecuentes.
En 2011, un terremoto en la isla Sur dejó como saldo 185 muertos y la destrucción de miles de edificios.
A pesar de que no se han reportado daños graves, el sismo de hoy ha generado preocupación en la población, ya que el temblor fue sentido por algunos residentes.
La agencia de defensa civil de Nueva Zelanda ha señalado que el terremoto tuvo una magnitud de 6.0, 57 kilómetros de profundidad y 50 kilómetros al noroeste de Paraparaumu.
Wellington, al sur de la isla Norte, es la ciudad más poblada del país y ha sufrido los efectos del ciclón, considerado el evento climático más destructivo de las últimas décadas. Además, se pronostican fuertes lluvias en los próximos días, lo que aumenta el riesgo de nuevos deslaves e inundaciones.