Diariamente, miles de millones de personas necesitan de datos satelitales para intercambiar mensajes, llamadas, navegación, finanzas, gestionar y mitigar desastres naturales, monitoreos de clima, e incluso información de seguridad nacional, pero estas actividades corren riesgo debido a las altas toneladas de basura tecnológica espacial, explicó la doctora Giannina Dalle Mese, profesora investigadora de la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Espacio (FACITE) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS).
La universitaria indicó que, según la Agencia Espacial Europea, se estima un promedio de cinco mil satélites en funcionamiento, los cuales comparten órbita con casi diez mil toneladas de basura espacial generada por diversas misiones a lo largo de los años, lo cual equivale a aproximadamente a más de treinta mil objetos de escombros.
Además de los cinco mil satélites que existen ahora mismo en funcionamiento, hay diez mil lanzamientos de satélites programados para los próximos diez años, (…) por eso se necesitan estrategias para después de la misión eliminar desechos para mantener el uso seguro de las órbitas en beneficio de la humanidad”, expresó.
Asimismo, informó que la misión ELSA de Astroscale será la primera misión comercial que busca eliminar desechos espaciales, constando de dos satélites; un satélite de servicio y un satélite cliente de menor magnitud, de tal manera que una vez en el espacio, estos se separen, replicando basura espacial, y el de satélite de servicio deberá recuperar al cliente.
“Esta misión tiene como propósito que las futuras misiones tengan una pieza que sirva de anclaje al satélite de servicio, una pieza ferromagnética que va a actuar como un imán, entonces, que el satélite de servicio cuente con un imán que sirva para capturar estos desechos con esa pieza ferromagnética”, explicó.
La investigadora expuso que el siguiente paso de ELSA es permitir al servidor funcionar de manera automática, sin necesidad de órdenes específicas desde la Tierra, permitiendo la detección de clientes para realizar maniobras de captura desde su trayectoria.
De igual manera, dijo que este proyecto permitirá continuar con las facilidades que los satélites permiten a los científicos y a la humanidad en general, ya que disminuye los riesgos de dañar los satélites en funcionamiento, haciendo posible la operación de las comunicaciones.