Familiares, amigos y compañeros de trabajo de José Cruz, el joven trabajador de un Bancomer asesinado a balazos durante un asalto la tarde del martes en Culiacán, acudieron este jueves a su domicilio donde es velado su cuerpo.
Arreglos florales y coronas adornan el feretro de “Crucito”, quien, apenas con 27 años de edad murió a manos de tres presuntos asaltabancos que entraron hasta la sucursal donde trabajaba y, pese a que este no les representaba ningún riesgo, le dispararon hasta arrebatarle la vida.
Uno de los tíos de Crucito, reveló que el joven recientemente se había casado, además de que estaba esperando a su bebé, a quien desafortunadamente no podrá conocer.
La familia y amigos lo calificaron como un buen esposo, un buen hijo, muy trabajador y saludable, pues practicaba el futbol, como también se lo renocieron equipos a través de redes sociales.
Los presuntos responsables se encuentran detenidos; un padre y sus dos hijos, quienes minutos antes de cometer el crimen, ya habían intentado asaltar otra sucursal bancaria en la colonia Ignacio Allende.
Se espera que en las próximas horas sean presentados ante un juez para que se defina la situación jurídica de los mismos.
Con información de Los Noticieristas