Hoy en día todas las empresas están conectadas a Internet. Hay muchas ventajas, pero es un arma de doble filo, pues la seguridad se ve comprometida. Ya no hace falta entrar a robar al local para llevarse el dinero, pues cualquier ciberdelincuente puede hacerlo cómodamente desde su casa con softwares especiales.
Algo parecido ocurre con los nuevos sistemas de apertura e ignición de los coches modernos, que usan un smartphone, llaveros o mandos, en lugar de la clásica llave con cerradura.
Hace unas semanas, la policía de Yorkshire detuvo a una banda de ladrones que había robado cinco Mitsubishi Outlanders. Registrando sus propiedades, descubrieron un extraño dispositivo con forma de Gameboy, capaz de abrir las puertas y poner en marcha el motor de unos 20 modelos de coches de marcas asiáticas como Mitsubishi, Kia, Hyundai, Nissan, Toyota, etc.
Según la policía, este dispositivo se vende en el mercado negro por casi 30 mil dólares. Lo más asombroso es que este Gameboy robacoches lo vende una empresa búlgara que se publicita en YouTube.
El dispositivo realiza un escaneo del sistema de apertura, que se activa cuando se intenta abrir el coche con la jaladera, y lo hackea para hacer creer al vehículo que es una llave legal. Con todos los permisos concedidos es posible abrir las puertas y encender el motor, para robar el coche tranquilamente.
Los tres miembros de la banda robacoches fueron condenados a entre 2 y 3 años de prisión.