Jasmine, de 20 años, puso su castidad en subasta a través del sitio “Cinderella Escorts” por la cantidad de 1.4 millones de dólares. De acuerdo a la agencia de acompañantes, el comprador es un “exitoso e inteligente banquero de Wallstreet“, quien superó las ofertas de un DJ anónimo de Los Ángeles y un magnate de Munich.
Así se ofrecía ella online:
“Quiero vender mi virginidad porque me di cuenta que a la edad de 20 años tengo muchas cosas que pagar, como la renta, el carro y las cuentas. Crecí en una familia muy religiosa, quería entregar mi virginidad después de casarme. Mi virginidad era muy importante para mí. Quiero venderla porque quiero estudiar, quiero descubrir el mundo, aprender idiomas y ser una mujer de negocios”.
Jasmine cuenta que en su momento estaba nerviosa, pero se siente afortunada de que el hombre haya resultado ser muy cortés e inteligente, asegura que se gustaron el uno al otro y volverán a salir juntos.