Tommy Fisher, un empresario estadounidense de 51 años, pretende vender un muro privado de casi 5 kilómetros construido en Texas, en la frontera entre EE.UU. y México, cuyo coste fue de 30 millones de dólares. Cuando Donald Trump fue elegido presidente en 2016, Fisher, que es donante del Partido Republicano y colaborador de Fox News, comenzó a pensar en levantar esta infraestructura como un proyecto personal.
En 2019, la organización ‘We Build the Wall’ pagó a la empresa del empresario 6,9 millones de dólares para construir en Nuevo México una parte del muro. Fisher comenzó a construir un segundo tramo después de recibir 1,5 millones de dólares adicionales. Y más tarde, ya al margen de la organización, continuó construyendo su muro, cuyo coste final fue de 30 millones de dólares, veinte veces más de lo estimado en un principio. El proyecto de Fisher ha sido repudiado por grupos ambientalistas y vecinos que se oponen al muro, pues sostienen que fue construido demasiado cerca del río Bravo y que podría ser un factor que agrave inundaciones.