Guillermina Jiménez Chabolla, mejor conocida como Flor Silvestre, fue una de las mujeres más importantes del cine de oro mexicano, su esposo era Antonio Aguilar, el Charro de México. Él y Flor se enamoraron durante el rodaje de la cinta El Rayo de Sinaloa, en 1957. Antonio Aguilar aseguró ver en la cantante “un sentimiento y una gran belleza por dentro y por fuera”. Flor Silvestre en ese entonces estaba casada con Francisco Rubiales “Paco Malgesto”, quien más tarde se convertiría un presentador popular de la televisión mexicana. Este matrimonio procreó dos hijos: Francisco y Marcela. Sin embargo, para 1958 ya habían comenzado con el proceso de divorcio. Se decía que Paco le prohibió a Flor volver a ver a sus hijos, por lo que ella lo hacía a escondidas de él.
Cuando Flor Silvestre conoció al cantante y actor Antonio Aguilar corría el año de 1950, ella tenía un programa radiofónico donde un día cantó como nuevo artista invitado un tal Tony Aguilar. Sin embargo, Antonio se casó con Otilia Larrañaga en 1958. Y finalmente, entre divorcios, acusaciones y escándalos, Flor Silvestre y Antonio Aguilar se casaron por el civil en 1959 y tuvieron dos hijos que siguieron sus pasos. El mayor, Antonio Aguilar, hijo, en 1960, y el menor, Pepe Aguilar, en 1968. La ceremonia religiosa fue décadas después cuando ambos lograron anular sus matrimonios anteriores.
Antonio Aguilar falleció a causa de complicaciones por una neumonía el 19 de junio del 2007, sus restos yacen en su rancho, El Soyate, en Zacatecas, donde también reposarán los de Flor Silvestre, quien murió por causas naturales el 25 de noviembre de 2020, a sus 90 años de edad.