En Arizona, Estados Unidos, un hombre de 51 años identificado como Pablo Martínez fue acusado por haber asesinado a su hijo de 6 años luego de intentar sacarle un demonio.
Así como lo lees.
De acuerdo con su confesión ante las autoridades, desde la semana pasada había notado que el niño tenía “un demonio dentro de él”, por ello, decidió con agua caliente.
¿De qué manera?
Martínez sostuvo al menor debajo del grifo de agua hirviente entre 5 y 10 minutos. Al escuchar un gorgoteo proveniente del baño la mamá del pequeño intentó entrar, sin embargo, la puerta estaba cerrada por lo que decidió llamar a la policía.
Lamentablemente fue demasiado tarde ya que el pequeño había perdido la vida.
Fuente: Excélsior.