Resulta que algunas personas han resultado resistentes a dos medicamentos fundamentales con los que se trata el VIH: efavirenz y nevarapina.
Esto está pasando en algunos países como Honduras, Cuba, Sudáfrica, Nicaragua, Papua Nueva Guinea, Uganda, Namiba, Guatemala, Argentina, Zimbabu, Escautini, Nepal, México y Camerún
¿Y cómo se dieron cuenta?
Esto fue debido a unas encuestas que se realizaron en el periodo de 2014 a 2018 en diversas clínicas seleccionadas al azar. En la que se examinó la efectividad de los medicamentos utilizados durante ese periodo.
¿A qué se debe la resistencia al tratamiento?
Puede ser cuando se interrumpe el tratamiento, por ejemplo, en las mujeres, que estaban embarazadas durante el tratamiento, sólo lo consumían durante ese periodo por el bebé, pero ya que paren dejan de hacerlo, y cuando vuelven a ser tratadas, ya es rechazado.
Otra de las causas pudiera ser al temor de ser vistos siguiendo al pie de la letra sus medicamentos, o yendo por ellos, según los estudios de las encuestas realizadas.