Legisladores de San Francisco, California prohibieron que la policía y otras agencias gubernamentales usen el reconocimiento facial, la medida ha levantado críticas de personas que aseguran que el uso de las tecnologías es indispensable para garantizar la seguridad.
La medida se le conoce como “Ordenanza de detención de vigilancia secreta” que también obliga a las agencias de seguridad a revelan sus inventarios de tecnología.
Entre las disposiciones aprobadas están la lectura automática de matrículas y herramientas para la detección de disparos.